jueves, 27 de octubre de 2011

Desafío



Laura. Margarita. 2011. Neg. 6x6


Esta foto casi la elimino por que el foco no esta en su mirada. La deje reposar. La he vuelto a ver varias veces. Me gusta. El foco esta en su mano derecha, en las ondas de agua que la rodean. Su rostro está ligeramente movido. Lo sé. Y no importa. Repito, me gusta.

Laura apropiada del flotador luego de una lucha con su hermano, su tío y otros dos amigos. Posa victoriosa ante la cámara, victoriosa y desafiante luego de ganarle a los chicos. Hace bien. Reta con su mirada. Y a mi me cuesta reconocer a mi hija, y por qué he de reconocerla, si tan sólo es una foto, un retrato de ella...

miércoles, 26 de octubre de 2011

Como un adulto



Sebastián. Playa Larga, Todasana. 2007. Neg 6x6.


Esta fue la primera foto en la cual Sebastián no me pareció solamente un niño. Algo en su mirada, hace que piense en mi hijo como un adulto. Así esta foto no solo me sugiere una memoria pero también se proyecta en un futuro. El tenía 8 años.   

jueves, 13 de octubre de 2011

Retrato de una Novia



María. Caracas. 2011. Neg. 4x5


En un fin de semana de enero de 1999, tomé tres decisiones que han definido mi vida hasta el día de hoy. Las tomé junto con mi esposa Adriana. Entonces era mi novia. Sebastián Cayo, nuestro hijo, en su barriga. Todo se relaciona: ser padre, casarnos y estudiar fotografía. Esas fueron las decisiones. Tenía 21 años recién cumplidos. Ya son casi 13 años de eso. Tengo la suerte, con mucha ayuda, de poder aún caminar con esas tres decisiones. No estoy seguro que en ese entonces sabía lo que significaba casarse, ser padre y ganarse la vida como fotógrafo. A veces pienso con temor que todavía no lo se. Alguna idea me hago, eso sí. 

Hoy siento dicha. Pude retratar a María de novia el día de su boda. Ella es la prima hermana doble de mi esposa. Su padre es hermano del padre de Adriana y su madre hermana de la madre de Adriana. Ellas se parecen. Es lo mas cerca que puedo estar de retratar a mi esposa vestida de novia, bromeo. Adriana y yo nunca nos hemos casado por la Iglesia. Asi que mi broma no es en vano. Y hoy María confió en mi para retratarla en su día. Que alguien confíe en ti de esa manera es algo que siempre me deja impresionado. Sean cuales sean las posibles razones por las cuales una persona se case, siempre es un evento de singular importancia. El retrato o los retratos que de allí salgan tienen que, idealmente, generar una memoria positiva. Aquello que María este pensando mientras observa su anillo es un completo misterio, sólo ella lo sabe, y quizás esta foto la ayude a no olvidar...

Gracias María. A mi me hiciste recordar.

martes, 11 de octubre de 2011

PAPELTAPIZ: Silvia Castro


Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro




Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro




Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro




Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro





Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro




Camurí. La Guaira 2010. Neg. 6x6. ©Silvia Castro



Esta es la segunda serie que tengo el placer de presentar en esta sección de PAPELTAPIZ. La autora Silvia Castro desarrollo estos retratos en el primer curso que pude dictar en RMTF de Retrato 2. El desarrollo de esta serie fue un esfuerzo por parte de la autora que llevó alrededor de 1 año en culminar. Religiosamente visitaba la playa de Camurí ubicada en Macuto en el estado Vargas, casi todos los fines de semana, sábados y domingos,  consiguiendo la amable voluntad de sus habitantes y usuarios de posar ante su cámara. 
Como ya es costumbre le hice unas preguntas para que ella misma explicase su proceso.

1.) ¿Dónde tomaste las fotos?
Las fotos fueron tomadas en Camurí Chico.

2.) ¿Cuál es el gentilicio de los habitantes de Macuto?
El gentilicio es díficil, unos se definen macuteños, otros macutenses, pero macuteño es lo que mas escuche.

3.) ¿Por qué decidiste retratarlos?
El proyecto nació accidentalmente. Cuando nos pediste en Retrato hacer un trabajo con desconocidos, de una me vino la idea de hacerlos en la playa, pero no sabía muy bien que buscaba. Baje al litoral y me estacioné en Camurí, empecé a caminar y retratar, tenía años en que no bajaba y me impresionó como habían recuperado la playa, estaba muchísimo mejor a lo que recordaba antes de la tragedia de Vargas. De esa tarea de 12 retratos salieron 3 retratos que tome con los personajes montados sobre las piedras del malecón y cuando los vi juntos me parecieron como estatuas. Cuando se dio el chance de hacer Retrato 2 para realizar un proyecto quise desarrollar esta idea. Así que comencé un proyecto con las personas que dan vida a esta serie haciéndolos posar como estatuas, a manera de deidades. Porque son ellos los que lograron darle vida a Camurí.

4.) ¿Tienes alguna conexión personal con ese lugar de Venezuela?
Mis 4 abuelos al llegar de España hicieron vida en La Guaira, mi mamá nació en La Guaira, y yo aunque vivía en Caracas todas mis vacaciones las viví allí, así que mis recuerdos huelen todos a uva de playa, hay muchísimo cariño, y muchísimo dolor.

5.) ¿Alguna influencia en particular?
Creo que Rineke Dijkstra fue mi mayor influencia, cuando nos mostraste su trabajo yo jamás lo había visto y quede enamorada.

6.) ¿Te incómoda la posible comparación con su serie de los retratos de playa?
La verdad no, es un trabajo que admiro muchísimo por la forma en que maneja el retrato frontal, mi trabajo intentó inspirarse en eso, y en el espacio relativo a la playa, creo que el uso de los pedestales marca una diferencia a nivel de discurso. Y estoy segura que a nivel de calidad hay diferencias enormes, ya quisiera yo algún día poder tener un trabajo como el de ella.

7.) ¿Tuviste alguna pregunta en particular que hacer?
No preguntaba mucho, pero lo mejor es que nunca me preguntaban nada, ni para que era la foto ni nada, la experiencia fue muy peculiar, recuerdo un día en que llegue a tener una cola de 6 personas para que las retratara. Los venezolanos somos una vaina seria, y lo relajado de la playa, la cavita y las empanadas fue mi mejor recurso, la gente en la playa está mas alejada de la paranoia. Por otra parte hice muy buenos amigos, casi era mi equipo de producción, me ayudaban a organizar a la gente y hasta me recomendaban cuando estábamos eligiendo a quién retratar. La verdad fueron 6 meses magníficos.

8.) Hablame de tu "equipo" de producción...
Bueno eran el Vikingo, Mata (el salvavidas) y Jonathan. El Vikingo fue mi primer contacto unos 60 y pico de años, catire, canoso, tatuado y apenas lo conocí me invito una cerveza y me empezó a presentar a la gente, era bombero en Guarenas por muchos años hasta que perdió a un amigo y decidió retirarse, se fue a La Guaira y asegura ser muy feliz. El me presentó a Jonathan. Camurí hoy en día es un balneario muy seguro pero si no lo fuera yo igual tengo a Jonathan, moreno, flaco, altísimo, tatuado, piercing, de todo, pero adorable, un día le dijo a una señora que conocía que yo era su amiga y "quien se meta con esa jeva lo mato", ese es Jonathan. Y Mata se puede instalar a hablar sin parar nunca, actitud de super héroe total, me ayudó siempre.

8. ¿Tiene algún título esta serie?
El trabajo es como ellos le dieron vida a ese espacio, por eso simplemente lo he llamado Camurí, porque ellos son Camurí.


Nuevamente solo me queda agradecer a Silvia por su amabilidad en prestarnos sus fotos y responder dedicadamente a nuestras preguntas. 



domingo, 9 de octubre de 2011

Adriana y BB



Adriana y BB. Caracas. 2011. Neg. 8x10


Adriana y su blackberry entre las manos. Retratada con la 8x10.

jueves, 6 de octubre de 2011

No es Superman



Sebastian Cayo. Orlando, Florida. 2007

Esta fotografía la hice mientras estabamos en Disney. Un sitio bastante particular donde la alienacion parece dominarlo todo. El primer día ya queria irme, era Labor Day weekend, el día con mas afluencia en el parque. Menos mal que al día siguiente todo cambio, la gente se fue a trabajar, poca afluencia en el parque y pude disfrutar con mi familia lo que ellos ya estaban disfrutando. Lo peor de Disney es la comida. Junk Food todo el tiempo. Y en nuestra habitación teniamos una mesa con todas las chucherias de los gustos particulares de cada quien y de los gustos compartidos a su vez. Por ello hice una serie de retratos individuales, cada quien con lo suyo.  El de Sebastian siempre me ha encantado. No es Superman, es Sebastian Cayo me da mucha risa. Hay una sútil ironia entre la artimaña publicitaria, el icono del superheroe y el deseo proyectado del padre sobre el hijo.





miércoles, 5 de octubre de 2011

Solo ella puede ser esta foto



Adriana. Mérida. 2011. Neg. 8x10

Cuánto de este trabajo depende de ella. Su disposición, su talento, su paciencia, su voluntad en participar, su fe en lo que yo estoy haciendo. Para este retrato posó tranquilamente media hora o más. Fueron 3 exposiciones. Dos a color con una 4x5 y luego otra con la 8x10. Bajo la cobija no tenia ropa. Estabamos al aire libre y era frío merideño, 1.800 m.s.n. 4:30 p.m. clima nublado. No hay rastros de esa información en la foto. No se puede ver su esfuerzo.  Nada de la dificultad que lleva se manifiesta en la imagen; tampoco es que importe. Solo aquello que puede transmitir y evocar es relevante en un retrato. La historia alrededor es circunstancial para el hecho fotográfico... es accidental, y eso que no está presente pero si latente en su imagen hace que solo ella puede ser esta foto.

lunes, 3 de octubre de 2011

8x10 pulgadas



Páramo de Mifafi. Carretera de Piñango. Edo. Mérida. 2011. Neg. 8x10


Este año hice un cambio importante con relación a mi manera de abordar la presencia de mi trabajo en Internet. Anteriormente estaba negado por distintas razones, principalmente porque no conseguía la manera de comunicarme en mis propios términos. Participar y alimentar un blog con cierta regularidad me ha ayudado a acercarme a esa voluntad. Aquí puedo mostrar fotos y comentarlas según sea mi capricho y más o menos, servidor mediante, cuando yo quiero.
Al mismo tiempo que tomé esa decisión finalmente se dio la oportunidad de obtener una cámara de formato 8x10. En estos meses he estado tratando de aprender a utilizarla con soltura y comodidad. Es un monstruo difícil de dominar pero allí vamos haciendo avances. Recuerdo que cuando comencé a hacer las dos cosas al mismo tiempo dije algo así como: Decidí entrar en el siglo XXI con actitud de fotógrafo de siglo XIX. Para bien o para mal soy más amigo de las viejas tecnologías fotográficas que estas que nos abordan hoy en día con todos sus pitos y trompetas. 
Por ende ahora estoy mostrando uno de los primeros negativos que me han gustado. Que conste que es un negativo escaneado y no una copia de contacto escaneada, que es para allá hacia donde enfilo mis acciones: hacer copias de contacto en el laboratorio en papel de fibra de blanco y negro.
Paso a paso.